¿QUÉ ES?: El cloruro de amonio es también conocido como sal amoniaco o cloruro amoniaco, es un compuesto inorgánico de fórmula (NH4Cl) y una sal cristalina blanca que es muy soluble en agua; las soluciones de cloruro de amonio son ligeramente ácidas. Así mismo, sal amoniaco es el nombre de la forma mineralógica natural del cloruro de amonio.
¿PARA QUÉ SIRVE?: Este compuesto proporciona amonio (NH4+), que luego es absorbido por las plantas y convertido en grupos amino para su uso por las mismas. Por lo tanto, el papel del cloruro de amonio es proporcionar el elemento nitrógeno en cada una de éstas.
USOS DEL NUTRIENTE: La aplicación predominante de cloruro de amonio es como fuente de nitrógeno en fertilizantes (correspondiente al 90% de la producción mundial de cloruro de amonio) como el fosfato de cloramonio. Sin embargo, también tiene distintas aplicaciones, entre las que se encuentra la minería: en la recuperación de metales nobles; en la industria farmacéutica: medicinas; en el acero: baños químicos para recubrimiento con zinc y estaño y fundentes para soldar; en lo textil: estampado de telas; en la industria química: fabricación de varios compuestos de amoniaco; en pinturas y recubrimientos: colorantes; en la agricultura como: fertilizante; en la construcción: fabricación de cemento de limaduras para juntas de tubos, entre otras.
RECOMENDACIONES DE USO: No es adecuado para cultivos sensibles al cloro como el tabaco, la caña de azúcar, la remolacha azucarera, el árbol del té y la papa, mientras que en la sandía, las uvas, etc. no deben usarse durante mucho tiempo. Por ello, no debe usarse en terrenos salinos-alcalinos donde el drenaje sea desfavorable para evitar daños a la sal del suelo, ya que el cloruro de amonio es más adecuado para los campos de arroz y no es adecuado para áreas con condiciones secas y secas. No obstante, también se recomienda tomar precauciones para comprar, usar y almacenar productos de este compuesto.