Cifras de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) señalan que desde 2010, a lo largo del territorio nacional se usan en promedio 4.55 toneladas de plaguicidas por cada mil hectáreas de cultivo.
Por otro lado, un estudio realizado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Universidad de Campeche y Greenpeace, registra el uso de cuando menos 30 químicos prohibidos por otros países.
Las consecuencias se llevan del plato a la boca, “ya que impacta en el desarrollo de distintos tipos de cáncer, como son de colon, de pulmón, de páncreas, de riñón, de vejiga”, destacó la diputada Araceli Celestino Rosas, del PT.
Es por ello que en el «Seminario virtual: Implicaciones éticas de la innovación tecnológica y de la actividad científica en México» que celebra la Cámara de Diputados se abordó el derecho humano a acceder a alimentos sanos, libres de contaminantes químicos.
“Las legisladoras y legisladores tenemos tareas pendientes para asegurar un ambiente sano para todos, pero en especial de las niñas y de los niños”, apuntó la diputada María Eugenia Hernández Pérez, (Morena), coordinadora temática de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación.
En Campeche, Chiapas, Chihuahua, Michoacán, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Sinaloa, Tamaulipas y Veracruz, estados clave en la producción de alimentos, se han detectado el más alto uso de agrotóxicos.
De acuerdo con Armando Hernández Cruz, de la Sexta Visitaduría de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, “se pueden identificar sitios contaminados por compuestos orgánicos persistentes a lo largo del territorio nacional. Se ha encontrado que las entidades federativas como Sinaloa y Yucatán muestran elevados niveles de contaminación por plaguicidas o agrotóxicos”.
Académicos apuestan por el cultivo orgánico de frutas y vegetales. Desde la Universidad Autónoma de Chapingo impulsan, en el norte de Veracruz, a productores de naranja libres de contaminantes.
Manuel Ángel Gómez Cruz, académico de la Universidad, explicó que “en la cuestión económica se está vendiendo esa naranja a más de 100 por ciento de sobreprecio, tenemos un mayor ingreso y los productores están trabajando en un ambiente sano, los trabajadores igual, los consumidores están obteniendo un consumo sano”.
Cabe destacar que el pasado 17 de febrero la Cámara de Diputados aprobó una nueva regulación de plaguicidas altamente peligrosos, y está pendiente aún su discusión en el Senado de la República.