¿QUÉ ES?: En su forma natural, el amoniaco es un gas incoloro y está compuesto por una parte de nitrógeno (N) y tres partes de hidrógeno (H3). El amoniaco anhidro, es un gas fácilmente licuable, muy soluble en agua, incoloro, de olor típico irritante y sofocante. En condiciones normales de presión y temperatura en un gas, pero al licuarse fácilmente, la presión se puede manejar y almacenar en estado líquido, aunque en este último es muy peligroso y deben tomarse ciertas precauciones en su uso y manejo.
¿PARA QUÉ SIRVE? Sirve como elemento fundamental para los fertilizantes de nitrato de amonio que libera nitrógeno, un nutriente esencial para el cultivo de plantas, incluidos los cultivos agrícolas y céspedes.
USOS DEL NUTRIENTE: El amoniaco es ampliamente utilizado en diversos productos, aunque su uso más común es en la industria agrícola (90%), también se emplea en el sector textil, plástico, refrigerante, belleza, entre otros usos más particulares.
RECOMENDACIONES DE USO: El amoniaco líquido debe aplicarse desde un depósito, a presión instalado en un tractor, ya que, al ser un gas licuado, se inyecta, con una profundidad de 10 a 20 cms, según las condiciones del suelo. Es por esto, que a diferencia de otros abonos nitrogenados, debe fijarse inmediatamente en el suelo, ya que en caso contrario se perderá pasando a la atmósfera, por lo que también puede ser la forma más barata de suministrar nitrógeno fertilizante.